Visual:
* Color: Las verduras vienen en una amplia variedad de colores, desde verduras profundas y rojos vibrantes hasta naranjas brillantes y blancos cremosos.
* forma: Las verduras pueden ser redondas, largas, planas o de forma irregular.
* Tamaño: Pueden ser pequeños como guisantes o grandes calabazas.
* textura: La superficie de un vegetal puede ser suave, rugosa, bachemente o incluso borrosa.
olfactory:
* aroma: Muchas verduras tienen aromas distintos, algunos agradables y otras menos. Piense en el aroma agudo de las cebollas o el aroma terroso de los hongos.
táctil:
* textura: Esto describe la sensación de la verdura cuando se toca. Puede ser crujiente, suave, viscoso o incluso fibroso.
* Temperatura: Las verduras pueden ser frías, calientes o incluso calientes dependiendo de su temperatura.
Gustatory:
* Taste: Esta es la propiedad sensorial más importante cuando se trata de comida. Las verduras pueden ser dulces, saladas, agrias, amargas, umami o una combinación de estos gustos.
* Sabor: Este es un término más complejo que incluye sabor, aroma y textura. El sabor de una verdura puede ser sutil o intenso, dependiendo de la variedad.
Auditorio:
* sonido: Algunas verduras producen sonidos cuando interactuamos con ellos. Por ejemplo, rompiendo una judía verde o crujiendo en una zanahoria.
Otro:
* Sentición bucal: Esto describe la sensación de la verdura en nuestras bocas. Puede ser jugoso, seco, viscoso o incluso arenoso.
* Pungencia: Algunas verduras tienen un sabor picante o picante, como ajo o chile.
* Acidez: La acidez de un vegetal puede afectar su sabor y su sensación en la boca.
Las propiedades sensoriales de un vegetal son importantes porque influyen en nuestra percepción de su calidad, sabor y disfrute general. Al cocinar con verduras, es importante considerar cómo estas propiedades interactuarán para crear una comida deliciosa y satisfactoria.