Aquí hay algunas cosas específicas que los comunicadores científicos pueden aprender escuchando a las personas:
1. ¿Cuáles son los intereses de las personas?
¿Qué temas les interesan? ¿Qué les parece fascinante? Al comprender los intereses de las personas, podemos desarrollar contenido que probablemente les atraiga.
2. ¿Cuáles son las preocupaciones de la gente?
¿Qué les preocupa? ¿Qué desafíos enfrentan? Al comprender las inquietudes de las personas, podemos abordarlas directamente en nuestros mensajes y brindarles información que pueda ayudarlos.
3. ¿Cuáles son las necesidades de las personas?
¿Qué necesitan saber? ¿Qué recursos necesitan? Al comprender las necesidades de las personas, podemos brindarles la información y los recursos que necesitan para tomar decisiones informadas.
4. ¿Cuál es el conocimiento previo de las personas?
¿Qué saben ya sobre el tema? ¿Qué conceptos erróneos tienen? Al comprender el conocimiento previo de las personas, podemos aprovechar lo que ya saben y ayudarles a aprender cosas nuevas.
5. ¿Cuál es el estilo de aprendizaje preferido de la gente?
¿Prefieren leer, ver vídeos o escuchar podcasts? Al comprender los estilos de aprendizaje preferidos de las personas, podemos transmitir nuestros mensajes de la manera que les resulte más eficaz.
Escuchar a la gente no siempre es fácil. Puede llevar mucho tiempo y ser un desafío escuchar cosas que no queremos escuchar. Sin embargo, es esencial que los comunicadores científicos escuchen a las personas si queremos ser eficaces en nuestro trabajo. Al escuchar, podemos aprender sobre las personas a las que intentamos llegar y desarrollar mensajes que sean relevantes, atractivos e informativos.
A continuación se ofrecen algunos consejos para escuchar con eficacia:
- Estar presente y concentrado. Preste toda su atención a la persona con la que está hablando.
- Sea respetuoso y no juzgue. Cree un espacio seguro para que la persona comparta sus pensamientos y sentimientos.
- Hacer preguntas abiertas. Esto animará a la persona a compartir más información.
- Ten paciencia y deja que la persona se tome su tiempo. No los interrumpas ni los apresures.
- Prestar atención a señales tanto verbales como no verbales. Las señales no verbales pueden decir mucho sobre lo que una persona piensa y siente.
- Reflexiona sobre lo que has oído. Esto le mostrará a la persona que la estás escuchando y entendiendo.
Escuchando eficazmente podemos aprender mucho de las personas sobre sus intereses, preocupaciones, necesidades y conocimientos previos. Esta información puede ayudarnos a desarrollar mensajes que sean más relevantes, atractivos e informativos.