Ojos bien cerrados:cómo los mamíferos recién nacidos sueñan el mundo en el que están entrando
Los bebés recién nacidos pasan una cantidad importante de tiempo (50%-90%) en el sueño REM, la etapa del sueño en la que ocurren la mayoría de los sueños. Esto sugiere que los sueños desempeñan un papel en el desarrollo temprano del cerebro y en el procesamiento de la información. Los estudios han demostrado que el sueño REM aumenta la probabilidad de que el bebé recuerde la información proporcionada en el ejercicio de aprendizaje en el útero. Es interesante observar que los fetos pueden generar ondas cerebrales eléctricas similares a las de los adultos e incluso pueden desarrollar ciclos de sueño-vigilia mientras están en el útero. Además, los investigadores han propuesto una teoría de que los vívidos y complejos sueños REM de los recién nacidos pueden ser importantes para el desarrollo del cerebro, específicamente en la adquisición del lenguaje y la cognición social, a través del proceso de olvido activo de detalles sin importancia y la consolidación de recuerdos importantes.