Todos los sistemas del cuerpo trabajan en estrecha colaboración para mantener la homeostasis, el equilibrio dinámico de las condiciones internas que el cuerpo trabaja constantemente para preservar. El sistema muscular y el sistema circulatorio tienen una relación especialmente importante. Los dos sistemas se mantienen saludables, y su interacción es crucial a diario y a largo plazo. Sin ella, nuestros músculos serían incapaces de llevar a cabo nuestras actividades normales, y nuestra salud cardíaca eventualmente se deterioraría.
Función
Los músculos activos demandan grandes cantidades de oxígeno, y el sistema circulatorio trabaja duro para proporcionarlo. La sangre lleva oxígeno a los músculos. Cuando el cuerpo está en reposo, la sangre transporta nutrientes a los músculos para que puedan repararse y reconstruirse. La sangre también transporta los productos de desecho que producen los músculos que trabajan duro, de regreso a través de los pulmones para ser filtrados. Beneficios para el sistema muscular
Durante los períodos de actividad física intensa, el sistema circulatorio evitará órganos digestivos para que pueda proporcionar sangre adicional a los músculos. Mientras tanto, los pequeños vasos sanguíneos que sirven a la piel se expandirán para que más sangre tibia pueda llegar a la superficie del cuerpo. Esto ayuda a que el calor extra generado por los músculos activos se escape del cuerpo. A medida que los músculos aumentan de masa con el tiempo, también aumenta el número de vasos sanguíneos conectados a los músculos. Beneficios para el sistema circulatorio
Cuanto más sano y activo sea el sistema muscular, más sano será el circulatorio sistema. Cuando nos movemos, la bomba de nuestros músculos provoca que la sangre regrese al corazón a través de las venas. El ejercicio regular aumenta tanto la fuerza como el tamaño del corazón. También elimina los depósitos de grasa de los vasos sanguíneos y aumenta la producción de enzimas que destruyen los coágulos sanguíneos. El corazón aprende a aumentar su volumen sistólico (el volumen de sangre que bombea un ventrículo por latido) en respuesta a los rigores del ejercicio extenuante, y esto a su vez reduce la frecuencia cardíaca. En última instancia, esto puede permitir que su corazón lata cientos de miles de veces menos en el transcurso de la vida, por lo que el ejercicio le ahorra mucho trabajo a su corazón.
Posibles problemas
Si el sistema cardiovascular no puede suministrar músculos a los músculos oxígeno adecuado, los músculos sufrirán calambres y eventualmente dejarán de funcionar. Una falta de ejercicio a largo plazo hará que la cantidad y el tamaño de los vasos sanguíneos que sirven a los músculos se atrofien, se reduzcan, junto con los músculos mismos. Si los músculos no se emplean para el ejercicio regular, la salud general del corazón sufrirá. El corazón se debilitará y perderá masa, mientras que se acumulan depósitos de grasa en las arterias.
Prevención /Solución
La mejor manera de mantener sanos tanto su sistema circulatorio como su sistema muscular es obtener un acondicionamiento aeróbico regular. La medida más crítica de qué tan saludablemente envejece es la salud de su sistema cardiovascular, y el factor más importante para mantener esa salud es el ejercicio regular.