1. Complejidad de las llamadas: Los lémures exhiben varios tipos de vocalizaciones, incluidas llamadas tonales, llamadas pulsadas y frases complejas. Algunas especies de lémures pueden producir hasta 25 vocalizaciones diferentes. Esta complejidad vocal se considera un precursor del desarrollo del tono y el ritmo musical en los humanos.
2. Aprendizaje vocal: Se ha descubierto que algunas especies de lémures, como el indri, exhiben aprendizaje vocal, que implica adquirir vocalizaciones a través de la imitación y las interacciones sociales. Esta habilidad se alinea con la capacidad de aprendizaje vocal observada en los humanos, lo que sugiere una posible conexión evolutiva con el desarrollo del canto y el lenguaje humanos.
3. Estructuras cerebrales: Estudios comparativos de cerebros de lémures y cerebros humanos han revelado similitudes en los circuitos neuronales implicados en la producción y el procesamiento vocal. Estas estructuras cerebrales compartidas sugieren la presencia de mecanismos evolutivos conservados que pueden haber contribuido al desarrollo de habilidades musicales en los humanos.
4. Gesto y movimiento: Los lémures también utilizan gestos y movimientos físicos como formas de comunicación. Estos comportamientos no vocales pueden haber servido como base para el desarrollo de la danza, el lenguaje corporal y otras formas de comunicación no verbal en los seres humanos.
5. Vínculo social: La música juega un papel crucial en los vínculos sociales y la cohesión grupal entre los humanos. De manera similar, los lémures participan en intercambios vocales, como dúos y coros, para fortalecer los vínculos sociales y mantener la cohesión grupal. Estas funciones sociales de la comunicación vocal pueden haber sentado las bases de la naturaleza social de la música en los humanos.
6. Expresión emocional: Las vocalizaciones de los lémures a menudo transmiten información emocional, expresando emociones como alarma, agresión, apaciguamiento y excitación. Esta dimensión emocional de la comunicación vocal podría haber proporcionado una base para la expresión emocional que se encuentra en la música humana.
Es importante señalar que, si bien la comunicación de los lémures ofrece información valiosa sobre posibles vínculos evolutivos, representa sólo una faceta de los complejos factores que contribuyeron al surgimiento de la musicalidad humana. La música humana es un fenómeno multifacético influenciado por el desarrollo cognitivo, la evolución cultural y factores ambientales. El estudio de la comunicación de los lémures proporciona datos comparativos valiosos, pero no proporciona una explicación completa de la evolución musical humana.
En resumen, el estudio de la comunicación de los lémures arroja luz sobre los fundamentos evolutivos de la música humana. Al examinar la complejidad de las llamadas, el aprendizaje vocal, las estructuras cerebrales, los gestos y movimientos, los vínculos sociales y la expresión emocional en los lémures, los investigadores obtienen una comprensión más profunda de cómo la comunicación vocal prehumana puede haber allanado el camino para el desarrollo de habilidades musicales en los humanos. .