Un nuevo estudio de un antiguo pez óseo ha obligado a los científicos a repensar cómo evolucionaron los tiburones. El estudio, publicado en la revista Nature, encontró que el pez, llamado Andreolepis hedei, tenía una serie de características que antes se pensaba que eran exclusivas de los tiburones. Estas características incluyen un esqueleto cartilaginoso, una aleta dorsal y una aleta caudal con un lóbulo inferior que es más largo que el lóbulo superior.
El descubrimiento de _Andreolepis hedei_ sugiere que las características que se pensaba que eran exclusivas de los tiburones pueden haber evolucionado de forma independiente tanto en los tiburones como en los peces óseos. Esto significaría que los tiburones y los peces óseos no están tan relacionados como se pensaba anteriormente.
El estudio también tiene implicaciones para nuestra comprensión de la evolución de los vertebrados. El descubrimiento de _Andreolepis hedei_ sugiere que el esqueleto cartilaginoso pudo haber evolucionado antes de lo que se pensaba. Esto significaría que el esqueleto cartilaginoso puede ser la condición ancestral de los vertebrados, y que el esqueleto óseo evolucionó más tarde.
El estudio de _Andreolepis hedei_ es un recordatorio de que nuestra comprensión de la evolución de la vida cambia constantemente. A medida que se descubren nuevos fósiles, aprendemos más sobre la diversidad de la vida en el pasado y cómo se relacionan entre sí los diferentes grupos de organismos.
Aquí hay un resumen de los hallazgos clave del estudio:
* _Andreolepis hedei_ es un antiguo pez óseo que vivió hace unos 380 millones de años.
* _Andreolepis hedei_ tenía una serie de características que anteriormente se pensaba que eran exclusivas de los tiburones, incluido un esqueleto cartilaginoso, una aleta dorsal y una aleta caudal con un lóbulo inferior que es más largo que el lóbulo superior.
* El descubrimiento de _Andreolepis hedei_ sugiere que las características que se pensaba que eran exclusivas de los tiburones pueden haber evolucionado de forma independiente tanto en los tiburones como en los peces óseos.
* Esto significaría que los tiburones y los peces óseos no están tan relacionados como se pensaba anteriormente.
* El estudio también tiene implicaciones para nuestra comprensión de la evolución de los vertebrados. El descubrimiento de _Andreolepis hedei_ sugiere que el esqueleto cartilaginoso pudo haber evolucionado antes de lo que se pensaba.
* Esto significaría que el esqueleto cartilaginoso puede ser la condición ancestral de los vertebrados, y que el esqueleto óseo evolucionó más tarde.