* Condiciones atmosféricas: La turbulencia en la atmósfera de la tierra puede causar luz de la luna para refractar y distorsionar, creando un efecto brillante o inestable. Esto es similar a cómo las estrellas brillan.
* Movimiento de los ojos: Nuestros ojos constantemente hacen pequeños movimientos para ayudarnos a concentrarnos. Estos movimientos a veces pueden hacer que los objetos en el cielo parezcan moverse ligeramente, especialmente si los estamos mirando durante mucho tiempo.
* Ilusiones ópticas: A veces, nuestros cerebros pueden hacernos trucos, especialmente cuando miran algo en la distancia. La posición de la luna en el cielo puede crear una ilusión de movimiento.
Es importante recordar que la luna es un gran cuerpo celestial que orbita la tierra y en realidad no se sacude.