1. Similitud compositiva:
* isótopos: La Luna y la Tierra comparten composiciones isotópicas muy similares, lo que significa que sus bloques de construcción fueron originalmente iguales. Esto sugiere fuertemente un origen común.
* isótopos de oxígeno: Específicamente, las relaciones de isótopos de oxígeno en la Luna y la Tierra son prácticamente idénticas, proporcionando evidencia fuerte de un origen común.
* Elementos de seguimiento: Tanto la Luna como la Tierra tienen concentraciones similares de ciertos elementos traza, lo que respalda aún más la idea que formaron a partir del mismo material.
2. Momento angular:
* Sistema de luna de tierra: El sistema de luna de tierra tiene un alto momento angular total, que es difícil de explicar a través de otras teorías como fisión o captura. El impacto gigante proporciona una explicación natural para este momento angular.
3. Órbita lunar:
* órbita inclinada: La órbita de la luna se inclina en relación con el ecuador de la Tierra, que no se explica fácilmente por otras teorías. El impacto gigante, con su naturaleza violenta, puede explicar esta inclinación.
4. Rocas lunares:
* muestras lunares: Las rocas traídas de la luna por las misiones del Apolo muestran evidencia de altas temperaturas y un enfriamiento rápido, consistente con el intenso calor y la fusión que habría ocurrido durante un impacto gigante.
* Falta de volátiles: La luna se agota en elementos volátiles como el agua, lo que es consistente con las altas temperaturas experimentadas durante el impacto.
5. Simulaciones por computadora:
* Simulaciones realistas: Las simulaciones por computadora del impacto gigante recrean con precisión muchas de las características observadas de la luna, incluido su tamaño, composición y órbita. Estas simulaciones proporcionan un fuerte apoyo para la hipótesis.
6. Otra evidencia:
* cráteres de impacto gigante: Los cráteres de impacto gigante que se encuentran en otros planetas y lunas proporcionan evidencia de que tales eventos son comunes en el sistema solar temprano.
* Evidencia del sistema solar temprano: El sistema solar temprano era un lugar caótico, con numerosas colisiones e impactos, lo que hace que el escenario de impacto gigante sea plausible.
Si bien la hipótesis de impacto gigante sigue siendo la explicación más ampliamente aceptada para la formación de la Luna, es importante tener en cuenta que algunos aspectos permanecen debatidos. Por ejemplo, los detalles exactos del impacto y sus consecuencias aún se están estudiando. Sin embargo, la evidencia apunta abrumadoramente a un impacto gigante como el escenario más probable para la creación de la luna.