* Espectro electromagnético: Las estrellas emiten luz en todo el espectro electromagnético, desde ondas de radio hasta rayos gamma. Sin embargo, la mayoría de su energía se emite en la parte de luz visible del espectro, que es lo que nuestros ojos pueden ver.
* Temperatura y color: El color de una estrella está directamente vinculado a su temperatura de la superficie.
* Estrellas más calientes: Emitir más luz azul y blanca. La alta energía de su radiación alcanza su punto máximo en la longitud de onda más corta, parte de mayor energía del espectro visible.
* Estrellas más frías: Emite más luz roja y naranja. Su radiación máxima cae en la longitud de onda más larga, la parte de menor energía del espectro visible.
* Radiación de cuerpo negro: Las estrellas se comportan como blancos casi perfectos, lo que significa que absorben toda radiación que los golpea y emiten radiación a una distribución específica de longitud de onda basada únicamente en su temperatura. Esto se describe por la ley de Wien, que establece que la longitud de onda máxima de la radiación emitida es inversamente proporcional a la temperatura del objeto.
* Clasificación espectral: Los astrónomos clasifican a las estrellas en función de su color, que es un proxy para su temperatura. El sistema más común es la secuencia Obafgkm, con O Stars como las estrellas más calientes (azules) y M son las más geniales (rojo).
En resumen:
1. Las estrellas emiten radiación electromagnética en un amplio espectro.
2. El color de una estrella está determinado por la longitud de onda máxima de su emisión de luz visible.
3. La longitud de onda máxima está directamente relacionada con la temperatura de la superficie de la estrella.
4. Las estrellas más calientes emiten más luz azul, mientras que las estrellas más frías emiten más luz roja.
Esta relación permite a los astrónomos estimar la temperatura de las estrellas en función de su color, proporcionando información valiosa sobre sus propiedades y evolución.