* Observaciones antiguas: Las personas a lo largo de la historia, comenzando hace miles de años, notaron patrones en las estrellas y los usaron para navegación, cronometraje y narración de cuentos.
* Interpretación cultural: Diferentes culturas en todo el mundo reconocieron diferentes patrones en las estrellas, y los nombraron de acuerdo con sus propios mitos y leyendas.
* Estandarización moderna: En 1922, la Unión Astronómica Internacional (IAU) reconoció formalmente 88 constelaciones y definió sus límites.
Por lo tanto, no fue un solo individuo, sino más bien los esfuerzos colectivos de la humanidad en todas las culturas y a lo largo de la historia lo que condujo a las constelaciones que conocemos hoy.