1. Viejos satélites y escenarios de cohetes:
* satélites al final de la vida: Cuando un satélite completa su misión, es desorbitado (descenso controlado) o se deja en órbita. Muchos satélites más antiguos fueron diseñados sin desorbitar capacidades, dejándolos como basura.
* etapas de cohetes: Las partes de los vehículos de lanzamiento que empujan a los satélites a la órbita, incluidas las etapas superiores, a menudo permanecen en el espacio como escombros.
2. Eventos de fragmentación:
* colisiones: Los satélites y los escombros pueden chocar, creando una cascada de piezas más pequeñas. Esta es una preocupación seria, ya que puede conducir a un escenario del "Síndrome de Kessler", donde una reacción en cadena de colisiones hace que el espacio sea inutilizable.
* Explosiones: Las explosiones accidentales de satélites o etapas de cohetes crean grandes cantidades de escombros.
3. Otras fuentes:
* DESCUMOS RELACIONADOS DE MISSIÓN: Algunos escombros se liberan intencionalmente, como equipos desechados o los restos de las caminatas espaciales.
* Pruebas antisatélite: Los países que realizan pruebas de armas antisatélite crean grandes cantidades de escombros.
* Micrometeoroides naturales: Si bien no están hechos por el humano, estas pequeñas partículas del espacio pueden chocar con satélites, causando daños o creando escombros más pequeños.
El problema de la basura espacial está creciendo rápidamente y plantea una amenaza significativa para los satélites activos y las misiones espaciales futuras. Es por eso que hay un enfoque creciente en mitigar el problema a través de:
* Diseño de naves espaciales responsables: Construyendo satélites con capacidades de desorbitación y reduciendo la cantidad de escombros que liberan.
* Extracción de escombros activos: Desarrollo de tecnologías para capturar y eliminar los escombros de la órbita.
* Cooperación internacional: Trabajando juntos para crear regulaciones y estándares para la mitigación de escombros.