He aquí por qué el programa Apollo, y por lo tanto Neil Armstrong, fue a la luna:
* La Guerra Fría: La carrera espacial entre los Estados Unidos y la Unión Soviética fue un piloto importante. La URSS había logrado varios éxitos tempranos, como lanzar el primer satélite (Sputnik) y el primer hombre en el espacio (Yuri Gagarin). Estados Unidos necesitaba demostrar su superioridad tecnológica.
* Ambición científica: La luna era una frontera madura para la exploración. Los científicos estaban ansiosos por estudiar rocas lunares, su atmósfera y su campo gravitacional para aprender más sobre la formación del sistema solar y los orígenes de la Tierra.
* Prestigio nacional: Aterrizar en la luna fue un logro masivo y un poderoso símbolo de ingenio y liderazgo estadounidense. Aumentó la moral nacional y la posición internacional.
* Avances tecnológicos: El programa Apolo provocó avances increíbles en cohetes, navegación, soporte vital y otras tecnologías que beneficiaron a la sociedad de numerosas maneras.
Neil Armstrong, como piloto de prueba y astronauta altamente calificado, fue elegido para esta misión histórica debido a su experiencia y comportamiento tranquilo bajo presión. Era la persona adecuada para el trabajo, pero la razón por la que fue a la luna no era solo su propia ambición personal. Era parte de un esfuerzo colectivo mucho más grande impulsado por múltiples factores.