Si bien hemos enviado numerosos naves espaciales robóticas para estudiar Júpiter, ningún humano ha puesto un pie en el gigante del gas.
He aquí por qué:
* Júpiter es un gigante de gas: No tiene una superficie sólida para aterrizar.
* Condiciones extremas: Júpiter tiene cinturones de radiación intensos, un campo magnético muy fuerte y una atmósfera turbulenta que sería fatal para los humanos.
* Tiempo de viaje largo: Lleva mucho tiempo llegar a Júpiter, incluso con la nave espacial más rápida.
Sin embargo, los humanos han enviado numerosos naves espaciales para estudiar Júpiter, incluida la misión Juno, que actualmente está en órbita del planeta y nos proporciona ideas increíbles sobre su atmósfera, composición y campo magnético.