1. Observaciones infrarrojas: Tanto el Spitzer como el JWST son telescopios infrarrojos, lo que significa que pueden detectar luz invisible para el ojo humano. La luz infrarroja es emitida por objetos fríos del universo, como estrellas, planetas y galaxias en formación. Esto permite al JWST estudiar objetos que son demasiado fríos o débiles para ser vistos en luz visible.
2. Alta sensibilidad: JWST es mucho más sensible que Spitzer, lo que le permite detectar objetos más débiles y ver detalles más finos del universo. Esto permitirá al JWST estudiar objetos que están más lejos y son más difíciles de observar.
3. Amplio campo de visión: JWST tiene un campo de visión más amplio que Spitzer, lo que le permite cubrir un área más grande del cielo en una sola observación. Esto permitirá al JWST estudiar áreas más grandes del universo y encontrar objetos raros e inusuales.
4. Espectroscopia: JWST está equipado con un espectrógrafo que le permite dividir la luz en las longitudes de onda que la componen. Esto permitirá al JWST estudiar la composición química de los objetos del universo y determinar su temperatura, densidad y otras propiedades.
5. Sinergia con otros telescopios: JWST trabajará en conjunto con otros telescopios, como el Telescopio Espacial Hubble y el Atacama Large Millimeter/submillimeter Array (ALMA). Esto permitirá a los astrónomos combinar datos de diferentes telescopios para obtener una imagen más completa del universo.
En resumen, si bien el JWST no es un sucesor directo del Telescopio Espacial Spitzer, continuará el legado de Spitzer al proporcionar nuevos conocimientos sobre el universo a través de sus observaciones infrarrojas, alta sensibilidad, amplio campo de visión, espectroscopia y sinergia con otros telescopios.