Los desechos espaciales son un problema creciente. Actualmente hay más de 29.000 fragmentos de escombros de más de 10 centímetros orbitando la Tierra, y este número no hará más que crecer a medida que se lancen más y más satélites.
Los desechos espaciales representan un riesgo para los satélites y los astronautas. Incluso los fragmentos más pequeños pueden causar daños a los satélites, y una colisión con un fragmento más grande podría ser catastrófica.
Hay varias formas diferentes de limpiar la órbita de la Tierra de desechos espaciales. Un método consiste en utilizar redes o arpones para capturar los desechos. Otro método consiste en utilizar láseres para vaporizar los desechos.
Uno de los métodos más prometedores para eliminar los desechos espaciales es utilizar un "remolcador espacial". Un remolcador espacial es una nave espacial que puede agarrar un trozo de escombros y luego moverlo a una órbita más baja, donde eventualmente se quemará en la atmósfera.
Los remolcadores espaciales aún se encuentran en las primeras etapas de desarrollo, pero ofrecen el potencial de reducir significativamente la cantidad de desechos espaciales que orbitan alrededor de la Tierra.
A continuación se ofrece una explicación más detallada de cada uno de estos métodos:
Redes y arpones: Se pueden utilizar redes y arpones para capturar trozos de desechos espaciales. Las redes suelen estar hechas de un material liviano, como Kevlar, y se despliegan desde una nave espacial. Cuando una red entra en contacto con un trozo de escombros, lo envuelve y lo captura. Los arpones son similares a las redes, pero utilizan un gancho de púas para capturar los desechos.
Láseres: Se pueden utilizar láseres para vaporizar trozos de desechos espaciales. Los láseres suelen estar montados en una nave espacial y emiten un potente haz de luz que puede vaporizar los desechos.
Remolcadores espaciales: Los remolcadores espaciales son naves espaciales que pueden agarrar un trozo de escombros y luego moverlo a una órbita más baja, donde eventualmente se quemará en la atmósfera. Los remolcadores espaciales aún se encuentran en las primeras etapas de desarrollo, pero ofrecen el potencial de reducir significativamente la cantidad de desechos espaciales que orbitan alrededor de la Tierra.
Utilizando estos métodos, es posible limpiar la órbita de la Tierra de desechos espaciales y hacer que el espacio sea más seguro para los satélites y los astronautas.