De hecho, el horizonte de sucesos de un agujero negro es muy frío. La temperatura del horizonte de sucesos de un agujero negro es proporcional a su masa. Para un agujero negro con la masa del Sol, la temperatura del horizonte de sucesos es de unos 60 nanokelvins (nK). Esto es extremadamente frío, incluso en comparación con los lugares más fríos del universo. En comparación, la temperatura del fondo cósmico de microondas, que es la radiación remanente del Big Bang, es de aproximadamente 2,7 K.
Es importante señalar que la temperatura del horizonte de sucesos no significa que el agujero negro en sí sea frío. El interior de un agujero negro no está bien definido en la relatividad general y sus propiedades aún son objeto de investigación en curso.