Los astronautas se enfrentan a una serie de desafíos únicos cuando se trata de comer en el espacio. El entorno de microgravedad dificulta comer y beber, y los recursos limitados disponibles en las naves espaciales significan que los alimentos deben ser compactos, livianos y nutritivos.
Para afrontar estos desafíos, la NASA ha establecido el Laboratorio de Investigación de Alimentos Espaciales en el Centro Espacial Johnson en Houston, Texas. El laboratorio es responsable de desarrollar y probar nuevos productos alimenticios que satisfagan las necesidades de los astronautas en misiones de larga duración.
El equipo de científicos, ingenieros y nutricionistas del laboratorio trabajan juntos para crear productos alimenticios que sean:
* Seguro: Los alimentos deben estar libres de bacterias y otros contaminantes que podrían enfermar a los astronautas.
* Nutritivo: La comida debe proporcionar a los astronautas los nutrientes que necesitan para mantenerse sanos.
* Apetecible: La comida debe saber bien, o será menos probable que los astronautas la coman.
* Estable en almacenamiento: Los alimentos deben poder soportar las temperaturas y presiones extremas de los viajes espaciales.
* Fácil de preparar: La comida debe ser fácil de preparar, ya que los astronautas tienen tiempo y recursos limitados.
El Space Food Research Lab ha desarrollado una amplia variedad de productos alimenticios que cumplen con estos requisitos, que incluyen:
* Alimentos liofilizados: La liofilización elimina el agua de los alimentos, lo que los hace livianos y fáciles de almacenar. Los alimentos liofilizados se pueden rehidratar con agua antes de comerlos.
* Alimentos termoestabilizados: Los alimentos termoestabilizados se calientan a altas temperaturas para matar las bacterias. Este proceso hace que los alimentos sean estables en almacenamiento sin necesidad de refrigeración.
* Alimentos irradiados: La irradiación es un proceso que utiliza radiación ionizante para matar bacterias. Los alimentos irradiados son estables en almacenamiento y no requieren refrigeración.
* Alimentos envasados en bolsas de retorta: Los alimentos envasados en bolsas flexibles se envasan y luego se calientan a alta temperatura para matar las bacterias. Los alimentos envasados en bolsas de retorta son fáciles de abrir y se pueden comer fríos o calientes.
El Laboratorio de Investigación de Alimentos Espaciales de la NASA continúa desarrollando productos alimenticios nuevos e innovadores para satisfacer las necesidades de los astronautas en misiones de larga duración. El trabajo del laboratorio es esencial para garantizar que los astronautas puedan mantenerse sanos y bien alimentados durante su estancia en el espacio.
Aquí hay algunos detalles adicionales sobre el Laboratorio de Investigación de Alimentos Espaciales:
* El laboratorio se estableció en 1962, poco después del lanzamiento del primer vuelo espacial tripulado.
* El laboratorio está ubicado en el complejo del Edificio 32 del Centro Espacial Johnson.
* El laboratorio cuenta con una plantilla de unos 20 científicos, ingenieros y nutricionistas.
* El presupuesto del laboratorio es de unos 10 millones de dólares al año.
* El laboratorio ha desarrollado más de 200 productos alimenticios diferentes para astronautas.
* Algunos de los productos alimenticios más populares del laboratorio incluyen helado liofilizado, espaguetis y albóndigas termoestabilizados y cecina de res irradiada.