La misión Explorador de orígenes, interpretación espectral, identificación de recursos y regolitos de seguridad (OSIRIS-REx) de la NASA es una nave espacial robótica diseñada para explorar el asteroide cercano a la Tierra Bennu y devolver una muestra a la Tierra. La misión OSIRIS-REx nos ayudará a aprender más sobre los orígenes de nuestro sistema solar y cómo los asteroides pueden usarse como recursos para futuras misiones espaciales.
La nave espacial OSIRIS-REx se lanzó el 8 de septiembre de 2016 y llegó a Bennu el 3 de diciembre de 2018. La nave espacial pasó dos años estudiando Bennu, utilizando una variedad de instrumentos para mapear la superficie del asteroide, medir su composición y recolectar muestras de su regolito.
El 20 de octubre de 2020, la nave espacial OSIRIS-REx aterrizó con éxito en Bennu y recolectó una muestra del regolito del asteroide. La muestra se encuentra actualmente almacenada en la nave espacial y será devuelta a la Tierra en septiembre de 2023.
La misión OSIRIS-REx es un importante paso adelante en nuestra comprensión de los asteroides y su papel en la historia de nuestro sistema solar. Los hallazgos de la misión nos ayudarán a comprender mejor los orígenes de nuestro planeta y cómo podemos utilizar los asteroides como recursos para futuras misiones espaciales.
Estos son algunos de los hallazgos clave de la misión OSIRIS-REx hasta el momento:
* Bennu es un asteroide carbonoso, lo que significa que está compuesto por una mezcla de compuestos orgánicos y hielo de agua.
* Bennu es muy poroso, con una densidad de sólo 1,19 gramos por centímetro cúbico.
* La superficie de Bennu está cubierta de una variedad de características, incluidos cráteres, rocas y acantilados.
* La composición de Bennu es similar a la del Sol, lo que sugiere que el asteroide pudo haberse formado en las primeras etapas de nuestro sistema solar.
* Bennu es un recurso potencial para futuras misiones espaciales, ya que contiene una variedad de elementos que podrían usarse como soporte vital y propulsión.
La misión OSIRIS-REx es un gran éxito y sus hallazgos tendrán un profundo impacto en nuestra comprensión de los asteroides y su papel en la historia de nuestro sistema solar. El éxito de la misión es un testimonio del arduo trabajo y la dedicación del equipo OSIRIS-REx, y es un importante paso adelante en nuestra exploración del sistema solar.