Los científicos de la Universidad de Basilea han desarrollado nanopartículas que pueden servir como agentes de contraste eficientes para la resonancia magnética. Este nuevo tipo de nanopartículas produce alrededor de diez veces más contraste que los agentes de contraste reales y responden a entornos específicos. El periódico Comunicaciones químicas ha publicado estos resultados.
Los agentes de contraste mejoran la formación de imágenes de los tejidos obtenidos mediante imágenes por resonancia magnética (IRM). Si bien la detección de detalles estructurales en el cuerpo se puede mejorar significativamente mediante el uso de agentes de contraste, Las sustancias actuales producen un contraste insuficiente para la detección de las primeras etapas de las enfermedades. Otra limitación es que los agentes de contraste actuales no detectan sus entornos bioquímicos. Investigadores del Departamento de Química de la Universidad de Basilea han desarrollado nanopartículas, que pueden servir como agentes de contraste "inteligentes" para la resonancia magnética.
Los agentes de contraste se basan generalmente en el metal gadolinio, que se inyecta y sirve para obtener imágenes mejoradas de varios órganos en una resonancia magnética. Los iones de gadolinio deben unirse con un compuesto portador para evitar la toxicidad de los iones libres para el cuerpo humano. Por lo tanto, Los agentes de contraste altamente eficientes que requieren concentraciones más bajas de gadolinio representan un paso importante para avanzar en el diagnóstico y mejorar el pronóstico de salud del paciente.
Nanopartículas inteligentes como agentes de contraste
Los grupos de investigación de la profesora Cornelia Palivan y el profesor Wolfgang Meier del Departamento de Química de la Universidad de Basilea han introducido un nuevo tipo de nanopartículas, que combinan múltiples propiedades requeridas para los agentes de contraste:un mayor contraste de resonancia magnética para una concentración más baja, un potencial para una circulación sanguínea prolongada y capacidad de respuesta a diferentes entornos bioquímicos. Estas nanopartículas se obtuvieron mediante el ensamblaje conjunto de polímeros funcionalizados con heparina con iones de gadolinio atrapados y péptidos que responden a estímulos.
El estudio muestra, que las nanopartículas tienen la capacidad de mejorar la señal de resonancia magnética diez veces más que los agentes actuales. Además, tienen una eficacia mejorada en medio reductor, característica de regiones específicas, como tejidos cancerosos. Estas nanopartículas cumplen numerosos criterios clave para un mayor desarrollo, como la ausencia de toxicidad celular, ninguna propiedad anticoagulante aparente, y alta estabilidad en almacenamiento. El concepto desarrollado por los investigadores de la Universidad de Basilea para producir mejores agentes de contraste basados en nanopartículas destaca una nueva dirección en el diseño de agentes de contraste para resonancia magnética. y apoya su implementación para futuras aplicaciones.