* Tamaño y espacio: Los sistemas CSP requieren áreas grandes y abiertas para recolectar la luz solar de manera efectiva. Por lo general, se construyen a gran escala en granjas solares dedicadas. Un tejado es simplemente demasiado pequeño y desordenado para acomodar los espejos necesarios y los mecanismos de seguimiento.
* Calor y seguridad: Los sistemas CSP concentran la luz solar a temperaturas muy altas, creando un peligro significativo de incendio. Este nivel de calor es inseguro y poco práctico para una azotea residencial.
* Complejidad y costo: Los sistemas CSP son complejos, que requieren ingeniería avanzada y una alineación precisa. El costo de la instalación y el mantenimiento es significativamente mayor en comparación con los paneles fotovoltaicos (PV).
* Almacenamiento de energía: Los sistemas CSP a menudo dependen de la sal fundida para el almacenamiento de energía, que no es factible para las instalaciones del hogar.
Para uso residencial, los paneles fotovoltaicos (PV) son la opción preferida para la energía solar. Ellos son:
* compacto: Fácilmente instalado en los tejados.
* seguro: Sin peligro de incendio, ya que convierten la luz solar directamente a la electricidad.
* asequible: Los costos han disminuido significativamente a lo largo de los años.
* simple: Relativamente fácil de instalar y mantener.
Si bien la tecnología CSP tiene sus beneficios para la generación de energía a gran escala, no es una solución adecuada para las instalaciones solares en la azotea del hogar.