La latitud que menos energía solar recibe es la de 90 grados Sur, que es el Polo Sur. Esto se debe a que el eje de la Tierra está inclinado en dirección opuesta al Sol en un ángulo de 23,5 grados, por lo que los rayos del Sol siempre forman un ángulo con la superficie de la Tierra en los polos. Esto significa que los rayos del Sol se extienden sobre un área mayor en los polos, por lo que cada metro cuadrado de superficie recibe menos energía. Además, la atmósfera de la Tierra es más espesa en los polos, por lo que se absorbe o dispersa más energía del Sol antes de llegar a la superficie.