* Los velocímetros no son perfectos: Están midiendo instrumentos y, como cualquier instrumento de medición, tienen un margen de error. Pueden ser ligeramente inexactos debido a factores como:
* desgaste: Con el tiempo, los mecanismos del velocímetro pueden desgastarse, afectando su precisión.
* Tamaño del neumático: Si ha cambiado sus neumáticos a un tamaño diferente del original, los cálculos del velocímetro podrían estar apagados.
* Calibración: Incluso los nuevos velocímetros pueden no estar perfectamente calibrados.
* Electronic vs. Cable impulsado: Algunos autos tienen velocímetros analógicos con cables que se conectan a la transmisión. Estos pueden ser más propensos al deslizamiento o el desgaste, lo que impacta la precisión. Los velocímetros digitales suelen ser más precisos.
* Límites de velocidad: Si bien un automóvil puede ser capaz de exceder la velocidad indicada en el velocímetro, es importante recordar los límites de velocidad legales. Estos límites están establecidos para la seguridad y siempre deben cumplirse.
En esencia, la velocidad real de un automóvil puede ser más alta o más baja de lo que muestra el velocímetro. Es crucial ser consciente de esta potencial inexactitud y ejercer precaución mientras conduce.