1. Aplicar una fuerza en la dirección opuesta:
* frenado: Los frenos de un automóvil aplican una fuerza opuesta a la dirección del movimiento, desacelerándolo y disminuyendo su impulso.
* fricción: La fricción entre superficies, como un disco deslizándose sobre hielo o una bola rodando sobre hierba, crea una fuerza que se opone al movimiento y reduce el impulso.
* Resistencia del aire: La resistencia al aire actúa como una fuerza que se opone al movimiento de los objetos a través del aire.
2. Aumente el tiempo sobre el cual actúa la fuerza:
* aterrizaje suave: Una gimnasta que aterriza en una colchoneta acolchada aumenta el tiempo que tarda su impulso en cambiar, reduciendo la fuerza de impacto y evitando lesiones.
* amortiguación: Los materiales de amortiguación como las airbags en automóviles o la envoltura de burbujas alrededor de los objetos frágiles extienden el tiempo de impacto, disminuyen la fuerza y, por lo tanto, el cambio de impulso.
3. Cambiar la masa:
* Material de eliminación: Eliminar la masa de un objeto, como eliminar el combustible de un cohete, disminuye directamente su impulso.
4. Cambiar la velocidad:
* desacelerando: Simplemente reducir la velocidad del objeto disminuirá su impulso. Esto se puede lograr aplicando una fuerza en la dirección opuesta o permitiendo que las fuerzas naturales como la fricción actúen sobre ella.
Nota importante: El cambio en el momento es directamente proporcional a la fuerza aplicada y el tiempo sobre el cual actúa. Esto se conoce como el teorema de impulso-momento:
impulse =force × time =cambio en el momento
Ejemplo:
Imagina que estás tratando de detener un tren en movimiento. Puede aplicar una fuerza masiva por un corto tiempo (como chocarla en una pared), o puede aplicar una fuerza más pequeña durante mucho más tiempo (como usar frenos). Ambos métodos cambiarán el impulso del tren, pero la fuerza más pequeña durante más tiempo probablemente causará menos daño.