* Espejos: Un periscopio tiene dos espejos colocados en un ángulo de 45 grados. El primer espejo se coloca en la parte superior del periscopio, en ángulo para reflejar la luz que proviene de arriba. El segundo espejo se coloca en la parte inferior, en ángulo para reflejar la luz de regreso al ojo del espectador.
* Reflexión: Cuando la luz golpea un espejo, rebota en el mismo ángulo que golpeó. Esto se llama la ley de reflexión.
* Ruta de luz: La luz viaja en línea recta hasta que golpea el primer espejo. El primer espejo refleja la luz en un ángulo de 90 grados, dirigiéndola por el tubo de periscopio. Esta luz luego golpea el segundo espejo, que nuevamente lo refleja en un ángulo de 90 grados, enviándolo nuevamente al ojo del observador.
En resumen: Los dos espejos en un periscopio trabajan juntos para cambiar la dirección de la luz, lo que le permite ver objetos que están por encima o debajo de su línea de visión directa.
Aquí hay una analogía:imagina un periscopio como una caja larga y estrecha con un espejo en cada extremo. Miras en un extremo de la caja, y el espejo refleja tu vista hacia el otro extremo. El espejo en el otro extremo refleja la vista desde la dirección opuesta hacia usted.