* Tipo de vidrio: Los diferentes tipos de vidrio tienen fuerzas muy diferentes.
* vidrio templado: Este es el tipo más fuerte de vidrio común, a menudo utilizado en ventanas de automóviles y puertas de ducha. Puede soportar significativamente más presión que el vidrio normal.
* vidrio laminado: Este vidrio está construido con múltiples capas unidas, lo que lo hace resistente al destrozado. A menudo se usa en parabrisas y aplicaciones arquitectónicas.
* vidrio recocido: Este es el tipo de vidrio más común, y es relativamente débil.
* Espesor del vidrio: El vidrio más grueso puede soportar más presión.
* Forma del vidrio: El vidrio curvo o redondeado tiende a ser más fuerte que el vidrio plano.
* Temperatura: El vidrio se debilita a temperaturas más altas.
* Condiciones de carga: El tipo de presión aplicada (estática o dinámica) y su distribución afectan la resistencia del vidrio.
Directrices generales:
* vidrio recocido: Por lo general, se rompe menos de unas pocas libras por pulgada cuadrada (PSI) de presión.
* vidrio templado: Puede soportar varios cientos de PSI, pero eventualmente se romperá.
* vidrio laminado: Su fuerza depende del número y el tipo de capas, pero puede soportar significativamente más presión que el vidrio recocido.
Nota importante:
Estas son solo pautas generales. Para cualquier aplicación específica, es crucial consultar con un ingeniero de vidrio o fabricante para determinar el tipo apropiado y el grosor de vidrio para resistir la presión esperada.
Por seguridad, siempre es mejor errar por precaución y elegir un vaso que sea más fuerte de lo que crees que necesitarás.