No se requiere una cantidad específica de Newtons para matar a un ser humano, ya que la cantidad de fuerza necesaria para causar la muerte depende de una variedad de factores, incluida la ubicación y la naturaleza de la lesión, así como la salud y condición general del individuo. Sin embargo, generalmente se acepta que una fuerza de alrededor de 80 newtons es suficiente para causar lesiones graves o la muerte si se aplica en una zona vulnerable del cuerpo, como la cabeza o el pecho.