Cuando un haz de rayos X atraviesa el cuerpo, es absorbido por los huesos. La cantidad de rayos X que se absorben depende de la densidad del hueso. Los huesos más densos absorben más rayos X, mientras que los huesos menos densos absorben menos rayos X. Esta diferencia en la absorción crea una imagen de los huesos en una película de rayos X.
Los rayos X son una herramienta valiosa para diagnosticar fracturas óseas, tumores y otros problemas óseos. También se utilizan para guiar a los médicos durante la cirugía.
Estos son algunos de los usos específicos de los rayos X para tomar fotografías de los huesos de una persona:
* Para diagnosticar fracturas óseas. Las radiografías pueden mostrar la ubicación y el alcance de una fractura ósea. Esta información es esencial para planificar el tratamiento.
* Para detectar tumores óseos. Los rayos X pueden ayudar a los médicos a identificar tumores óseos, como el osteosarcoma y el sarcoma de Ewing. La detección temprana de tumores óseos es importante para un tratamiento exitoso.
* Para guiar a los médicos durante la cirugía. Los rayos X se pueden utilizar para guiar a los médicos durante una cirugía, como una cirugía de reemplazo de cadera o una cirugía de columna. Esto ayuda a garantizar que la cirugía se realice de forma precisa y segura.
Las radiografías son una forma segura y eficaz de tomar fotografías de los huesos de una persona. Los médicos los utilizan para diagnosticar y tratar una variedad de problemas óseos.