1. Reflexión:una parte de la luz se refleja de regreso al mismo medio en el que se originó. Esta reflexión sigue la ley de la reflexión, donde el ángulo de incidencia (el ángulo en el que la luz incide en la superficie) es igual al ángulo de reflexión.
2. Refracción:Otra parte de la luz sufre refracción, lo que significa que cambia de dirección cuando ingresa al vidrio debido a una diferencia en los índices de refracción del aire y el vidrio. El índice de refracción es una medida de cuánta luz se desvía al pasar de un medio a otro. La luz se curva hacia lo normal (una línea perpendicular a la superficie) cuando ingresa a un medio más denso (como el vidrio) desde un medio menos denso (como el aire).
3. Transmisión:Parte de la luz se transmite a través del vidrio, lo que significa que continúa viajando a través del vidrio sin ser reflejada ni absorbida. La cantidad de luz transmitida depende de la transparencia y el espesor del vidrio.
4. Absorción:El propio material de vidrio puede absorber una pequeña cantidad de luz. Esta absorción puede contribuir a que el vidrio parezca coloreado o teñido si ciertas longitudes de onda de luz se absorben con más fuerza.
5. Dispersión:Cuando la luz blanca incide sobre una superficie de vidrio, puede sufrir dispersión, que es la separación de la luz en los colores que la componen (espectro). Esto sucede porque diferentes longitudes de onda de luz (correspondientes a diferentes colores) se refractan en diferentes cantidades, lo que hace que la luz se extienda en un espectro similar al de un arco iris.
6. Reflexión interna total:En ciertas condiciones, cuando la luz incide en una superficie de vidrio desde el interior en un ángulo suficientemente pronunciado, sufre una reflexión interna total. En este caso, toda la luz se refleja de regreso al vidrio y nada se transmite ni se refracta. Este fenómeno es esencial para aplicaciones como fibra óptica, prismas y espejos.
El comportamiento exacto del vidrio que incide sobre la luz depende de factores como el tipo de vidrio (por ejemplo, vidrio corona, vidrio de piedra, etc.), sus propiedades superficiales (suavidad, recubrimientos), la longitud de onda de la luz y el ángulo de incidencia. Estos efectos desempeñan papeles cruciales en diversas aplicaciones y fenómenos ópticos que involucran materiales de vidrio.