En la valoración gravimétrica, una masa conocida del analito se disuelve en un disolvente. Luego se agrega gota a gota una solución estándar del valorante desde una bureta mientras se agita la solución del analito continuamente hasta que se completa la reacción. En el punto de equivalencia, los moles del valorante agregado son químicamente equivalentes a los moles del analito presente en la muestra.
A continuación se filtra el precipitado formado, se lava para eliminar posibles impurezas y se seca hasta masa constante. Luego se utiliza la masa del precipitado para calcular la concentración del analito en la solución original.
La valoración gravimétrica es una técnica analítica muy exacta y precisa, y a menudo se utiliza para determinar la concentración de metales, aniones y otras sustancias que pueden formar precipitados.