La teoría en cuestión, propuesta en la década de 1970 por los físicos Gerard 't Hooft y Alexander Polyakov, sugiere que los monopolos pueden desintegrarse mediante un proceso llamado producción de pares de Schwinger. En este proceso, el fuerte campo magnético de un monopolo da lugar a la creación espontánea de un par de partículas (un electrón y un positrón) a partir del vacío. El monopolo pierde energía en este proceso, lo que hace que se irradie y finalmente se desintegre.
Para probar esta teoría, un equipo de investigadores dirigido por físicos de la Universidad de California, Berkeley, realizó experimentos utilizando iones atrapados y simulaciones cuánticas. Crearon un simulador cuántico que se asemeja al campo magnético de un monopolo controlando con precisión las interacciones entre iones individuales. Al medir las propiedades de los iones atrapados, observaron patrones consistentes con el proceso de producción del par de Schwinger.
Esta verificación experimental marca un avance significativo en nuestra comprensión del comportamiento de los monopolos, aunque en un entorno simulado. Si bien la existencia de monopolos no se ha confirmado experimentalmente hasta la fecha, este descubrimiento cuántico fortalece el marco teórico que rodea a sus supuestas propiedades y mecanismos de desintegración.
Los resultados de esta investigación fueron publicados en la revista "Nature". La capacidad de estudiar la desintegración de los monopolos en un entorno controlado allana el camino para futuras investigaciones sobre las propiedades fundamentales de las cargas magnéticas y contribuye potencialmente a grandes teorías unificadas que buscan unificar las leyes de la física.