La memoria cuántica de diamante con vacante de germanio supera el tiempo de coherencia de 20 ms
Precisión en operaciones de redes cuánticas:rayos láser finamente sintonizados para direccionamiento y lectura resonantes iluminan la memoria cuántica GeV. Crédito:Katharina Senkalla.
Los centros de color del diamante son el foco de un número cada vez mayor de estudios de investigación, debido a su potencial para el desarrollo de tecnologías cuánticas. Algunos trabajos han explorado particularmente el uso de defectos de diamantes del grupo IV cargados negativamente, que exhiben una eficiente interfaz espín-fotón, como nodos de redes cuánticas.
Investigadores de la Universidad de Ulm (Alemania) aprovecharon recientemente un centro de vacantes de germanio (GeV) en diamantes para crear una memoria cuántica. La memoria cuántica resultante, presentada en Physical Review Letters artículo, mostró un tiempo de coherencia prometedor de más de 20 ms.
"El enfoque principal de nuestro grupo de investigación es la exploración de centros de color de diamantes para aplicaciones cuánticas", dijo a Phys.org Katharina Senkalla, coautora del artículo. "El defecto más popular del diamante hasta ahora ha sido el centro de nitrógeno vacante, pero recientemente también se han convertido en foco de investigación otros centros de color. Estos consisten en un elemento de la columna IV de la tabla periódica:Si, Ge, Sn o Pb, y una vacante en la red (es decir, falta el átomo de carbono del vecino siguiente)".
Se ha descubierto que los centros de color del Grupo IV exhiben emisiones mucho más fuertes en la línea de fonón cero que los centros con vacantes de nitrógeno empleados anteriormente. Además, la simetría de inversión de estos centros los hace muy adecuados para la integración en dispositivos nanofotónicos, un paso importante para una red cuántica escalable eficiente basada en fuentes de fotón único de estado sólido.
"Nuestro objetivo es hacer contribuciones significativas al desarrollo de redes cuánticas que faciliten la comunicación cuántica a larga distancia y la computación cuántica distribuida", dijo Senkalla. "En el ámbito de las redes cuánticas, un aspecto crucial es el nodo de la red cuántica, que exige una interfaz eficiente de espín-fotón y tiempos de memoria extendidos".
El grupo de investigación de la Universidad de Ulm lleva tiempo explorando el potencial de los defectos del grupo IV como candidatos para nodos de redes cuánticas, centrándose recientemente en el centro GeV. Estos defectos particulares tienen una eficiencia inherente en la interfaz espín-fotón, que se caracteriza por un flujo de fotones altamente coherente.
Un flujo tan coherente de fotones es un elemento crucial para permitir una comunicación cuántica eficaz a largas distancias. Sin embargo, la realización de sistemas cuánticos utilizando defectos de diamante del grupo IV implica superar varios desafíos.
"Estos defectos encuentran obstáculos relacionados con tiempos de memoria prolongados debido a la relajación mediada por fonones, lo que afecta la coherencia y el tiempo de memoria", explicó Senkalla. "Nuestro trabajo reciente se centra en abordar este desafío fundamental, impulsando el desarrollo de nodos de redes cuánticas robustos. A través de nuestros esfuerzos, aspiramos a superar estos obstáculos y contribuir significativamente al avance de las tecnologías cuánticas".