Un esfigmomanómetro es un dispositivo médico para medir la presión arterial. Emplea un manguito que se adhiere al brazo del paciente. Dos tipos principales incluyen mercurio, refiriéndose al elemento líquido utilizado para la medición, y aneroide, lo que indica la falta de cualquier líquido. Cada tipo de esfigmomanómetro tiene sus pros y contras, que se basan en las diferencias entre los dos.
History
El esfigmomanómetro de mercurio representa el método clásico y comprobado para medir la presión arterial. Fue presentado por primera vez en 1896 por el Dr. Scipione Riva-Rocci. El dispositivo consistía en una vejiga inflable junto con una columna de mercurio. Diferentes presiones causan diferentes niveles de mercurio en la columna, creando así un medio para medir la presión sanguínea. Esta idea básica continúa siendo utilizada hasta hoy en los esfigmomanómetros de mercurio. En 1905, el Dr. Nikolai Korotkov descubrió el método de usar un estetoscopio en combinación con el esfigmomanómetro para medir la presión sanguínea mediante los sonidos del flujo sanguíneo, una técnica que todavía se emplea en la actualidad.
Movilidad
El esfigmomanómetro aneroide consiste en un dispositivo de resorte y una membrana de metal que traduce las señales del manguito y opera una aguja en el manómetro. Esto no requiere líquido. La ausencia de líquido proporciona movilidad, ya que este dispositivo se puede mover fácilmente de un lugar a otro. Además, se puede colocar en las paredes. El esfigmomanómetro de mercurio debe mantenerse en un lugar nivelado para que el mercurio permanezca en su lugar. Transportarlo corre el riesgo de afectar su precisión.
Accuracy /Calibration
Según un artículo publicado en la Revista de Política de Salud Pública que estudió la precisión del mercurio y los esfigmomanómetros aneroides durante el período de 1995 a 2009, mercurio proporcionó resultados más precisos. Un factor de precisión implica la calibración. Al igual que la mayoría de los dispositivos, la falta de calibración en forma periódica da como resultado lecturas inexactas. Los dispositivos Aneroid se deben calibrar con más frecuencia debido a que son más complejos que los dispositivos de mercurio. Se producen resultados imprecisos cada vez que la aguja no reposa en cero antes de su uso, lo que requiere una calibración.
Problemas
El mercurio es un material peligroso y contaminante. Su uso en un entorno médico presenta problemas que incluyen posibles roturas, fugas y eliminación. Esta diferencia entre el mercurio y el aneroide lidera el esfuerzo para eliminar el uso de mercurio en los hospitales. Además de la seguridad, la consideración más importante en la medición de la presión arterial es la precisión. Según el Departamento de Medicina de la UCLA, las mediciones inexactas de la presión arterial conducen a diagnósticos y tratamientos defectuosos. Los esfigmomanómetros aneroides pueden proporcionar mediciones precisas siempre que se calibren correctamente y con frecuencia.