1. Costos económicos del cambio climático:El cambio climático ya está causando pérdidas económicas sustanciales y se espera que estos costos aumenten en las próximas décadas. Estos impactos incluyen:
- Mayor frecuencia y gravedad de fenómenos meteorológicos extremos, como inundaciones, sequías, incendios forestales y huracanes, que provocan daños a la infraestructura, perturbaciones comerciales y pérdida de medios de vida.
- Cambios en los rendimientos agrícolas, que afectan la producción mundial de alimentos y la seguridad alimentaria.
- Impactos en los recursos hídricos, que provocan escasez de agua y una mayor competencia por el agua.
- El aumento del nivel del mar amenaza a las comunidades e infraestructuras costeras.
- Impactos en la salud debido a las olas de calor, la contaminación del aire y las enfermedades transmitidas por vectores, lo que genera mayores costos de atención médica y una reducción de la productividad.
Ignorar estos costos y no tomar medidas para mitigar el cambio climático conducirá a pérdidas económicas aún mayores en el futuro.
2. Beneficios económicos de la mitigación a largo plazo:La transición a una economía baja en carbono ofrece oportunidades y beneficios económicos a largo plazo. Al invertir en energía renovable, eficiencia energética y prácticas sostenibles, podemos:
- Crear nuevos puestos de trabajo e impulsar el crecimiento económico.
- Mejorar la calidad del aire, lo que conducirá a una reducción de los costes sanitarios y a una mejora de la salud pública.
- Incrementar la resiliencia a los impactos climáticos, reduciendo el riesgo de pérdidas económicas futuras.
- Promover la innovación tecnológica, dando lugar a nuevas industrias y ventajas competitivas.
3. Ventaja competitiva en los mercados globales:Ignorar el cambio climático puede poner a los países en desventaja competitiva en los mercados globales. Muchos países ya están implementando políticas climáticas y mecanismos de fijación de precios del carbono, y las empresas que no se adapten a estas tendencias pueden encontrarse en desventaja en términos de costos, reputación y acceso a los mercados.
4. Riesgos financieros:Los inversores reconocen cada vez más los riesgos financieros asociados con el cambio climático. Esto puede afectar el costo de capital de las empresas que tienen una alta exposición a los riesgos climáticos y dificultarles el acceso a financiación. No abordar el cambio climático puede provocar una devaluación de los activos, una menor confianza de los inversores y posibles activos varados (por ejemplo, reservas de combustibles fósiles que pierden su valor).
5. Malestar social y desigualdad:Los impactos del cambio climático afectan desproporcionadamente a las poblaciones vulnerables, lo que genera malestar social y una mayor desigualdad. Esto puede resultar en un aumento del gasto social y un menor apoyo público a los esfuerzos de recuperación económica.
En resumen, ignorar el cambio climático en nuestra recuperación de la pandemia no es económicamente viable. Es esencial integrar la acción climática en nuestros planes de recuperación y la transición hacia una economía baja en carbono para mitigar los costos económicos del cambio climático, aprovechar las oportunidades de crecimiento sostenible, seguir siendo competitivos en los mercados globales y generar resiliencia ante futuras crisis.