Por qué las cortinas submarinas artificiales no salvarán los glaciares en retirada de la Antártida Occidental
Enfriar el océano frenaría la pérdida de hielo de los glaciares de la Antártida occidental, pero no lo suficiente como para detener el aumento del nivel del mar. Crédito:Observatorio de la Tierra de la NASA, CC BY-SA
Algunos investigadores han propuesto recientemente la construcción de estructuras artificiales (cortinas o muros submarinos) para evitar que el calentamiento del océano llegue a los glaciares que se derriten más rápidamente en la Antártida Occidental.
Si son efectivas, estas intervenciones podrían ahorrar billones de dólares en impactos costeros evitados.
Pero se estima que construir una operación de tan gran escala en uno de los lugares más inaccesibles de la Tierra costará entre 50.000 y 100.000 millones de dólares y otros 1.000 millones de dólares al año para su mantenimiento. También podría tener impactos negativos en el resto de la capa de hielo y la vida marina en el Océano Austral.
Nuestro nuevo estudio, publicado en Communications Earth &Environment , sopesa si este tipo de experimentos valen la pena.
Exploramos las condiciones necesarias para detener el retroceso descontrolado de los glaciares en la bahía del mar de Amundsen, el sector de la Antártida occidental que actualmente está perdiendo la mayor parte de hielo. Descubrimos que bloquear el agua cálida de la bahía puede no ser suficiente para evitar el aumento continuo del nivel del mar en la región.
Investigando el destino de la Antártida Occidental
El futuro de la capa de hielo de la Antártida es la mayor incertidumbre en las proyecciones del aumento global del nivel del mar durante el próximo siglo. Durante los últimos 25 años, la capa de hielo ya ha contribuido con 7,6 mm al aumento global del nivel del mar y el ritmo de pérdida de masa se está acelerando.
Gran parte de este aumento se debe a una corriente oceánica cálida que inunda cuencas profundas cercanas a partes de la Antártida occidental. Derrite las partes de la capa de hielo que desembocan en el océano.
Esta agua cálida provoca algunas de las tasas más altas de derretimiento de las plataformas de hielo observadas en el continente y está provocando que el hielo se adelgace y retroceda rápidamente. Investigaciones recientes sugieren que este retroceso ahora es inevitable.
Las observaciones satelitales han mostrado un importante adelgazamiento y retroceso de los glaciares en esta región. A algunos científicos les preocupa que este sector ya haya superado el umbral de una retirada irreversible.
Más información: Alanna Alevropoulos-Borrill et al, El enfriamiento sostenido del océano es insuficiente para revertir el aumento del nivel del mar desde la Antártida, Comunicaciones Tierra y Medio Ambiente (2024). DOI:10.1038/s43247-024-01297-8
Información de la revista: Comunicaciones Tierra y Medio Ambiente
Proporcionado por The Conversation
Este artículo se vuelve a publicar desde The Conversation bajo una licencia Creative Commons. Lea el artículo original.