Microban es una marca registrada para el agente antimicrobiano triclosan. Triclosan se usa en una amplia variedad de productos de cuidado personal y del hogar. Estos incluyen limpiadores, pasta de dientes, jabón, enjuague bucal, cremas de afeitar y desodorante. También se puede encontrar en productos de plástico, como utensilios de cocina y juguetes. Triclosan se vierte por desagües en los sistemas de alcantarillado municipales. De la planta de aguas residuales, se abre paso en los ecosistemas acuáticos, el agua potable y el suelo que se fertiliza con lodos cloacales tratados, también conocidos como "biosólidos".
Organismos acuáticos
Los efectos de triclosán en los ecosistemas acuáticos han sido bien estudiados. Se ha demostrado que el triclosán inhibe el crecimiento, la reproducción y la fotosíntesis de plantas acuáticas. Los efectos conocidos en animales acuáticos incluyen muerte, inhibición del crecimiento, movilidad reducida y baja fertilidad. La susceptibilidad de los animales acuáticos al triclosán varía según la especie, la edad y la intensidad y duración de la exposición. Los peces jóvenes son más sensibles al triclosán que los peces maduros, y lo mismo es cierto para las ranas con garras africanas. La exposición a una baja concentración de triclosán durante varios días puede tener el mismo efecto que la exposición a una concentración alta durante 24 horas. Se ha demostrado que el triclosán se acumula en los cuerpos de los peces, un proceso conocido como "bioacumulación", y podría potencialmente subir la cadena alimenticia a los depredadores terrestres, como los humanos y las águilas. La bioacumulación eleva la concentración de una toxina en el medio ambiente, aumentando la probabilidad de que los organismos se expongan a una dosis alta.
Organismos terrestres
Múltiples estudios han demostrado que el triclosán puede ser tóxico para los microbios del suelo , lombrices y varias especies de plantas con flores. Este es un problema grave, ya que estos organismos contribuyen a importantes procesos ecológicos, como la descomposición de la materia orgánica, la aireación del suelo, el intercambio de gases y el reciclaje de nutrientes. Además, se ha demostrado que el triclosán se acumula en los tejidos de las lombrices y los caracoles. Ambos animales son una importante fuente de alimento para muchas especies de aves y mamíferos, y por lo tanto, son un camino por el cual el triclosán puede moverse a través de la cadena alimentaria. El triclosán no parece ser letal para los mamíferos, pero se ha relacionado con la producción alterada de espermatozoides en ratas y la depresión del sistema nervioso en ratones.
Biosolids and Toxicity
Los resultados de un estudio publicado en la edición de marzo de 2011 de "Toxicología y química ambiental" sugiere que el daño a los organismos del suelo se reduce cuando se aplica triclosán como parte de un fertilizante biosólido. El estudio probó la toxicidad del triclosán, combinado en el suelo con biosólidos, en lombrices y bacterias del suelo, y descubrió que no había efecto a corto plazo en ninguno de los organismos. Los autores creen que los biosólidos se unen al triclosán, por lo que es menos disponible en el medio ambiente. Sin embargo, es importante que los biosólidos se apliquen con moderación al suelo, ya que el exceso de aplicación puede provocar el drenaje de triclosán en el agua subterránea.
Salud humana
Un artículo de revisión sobre la aparición y toxicidad del triclosán en el medio ambiente, publicado en la edición de mayo de 2012 de "Environmental Science Pollution Research", informa que el triclosán generalmente ingresa al cuerpo humano cuando se aplican productos de cuidado personal o se ingieren productos de higiene bucal. Existe alguna evidencia de que la exposición al triclosán causa irritación de la piel, pero ningún estudio ha investigado si el triclosán se retiene en el tejido humano, o si se descompone en el cuerpo, produciendo subproductos químicos peligrosos. Los estudios de laboratorio han demostrado que el triclosán aumenta la resistencia de las bacterias que causan enfermedades a otros agentes antibacterianos, como la penicilina. Con base en los resultados de estudios en animales, hay evidencia de que el triclosán podría alterar el sistema endocrino humano, causando problemas de desarrollo y reproductivos.