La preocupación de los padres es que jugar Fortnite durante la escuela puede tener un impacto negativo en la educación de un niño. Por un lado, puede provocar distracciones y una disminución de la concentración, lo que afecta el rendimiento académico. Además, comunicarse con compañeros de equipo o participar en interacciones en línea durante la clase puede alterar potencialmente el entorno de aprendizaje de toda el aula.
Para abordar este problema, los padres deben adoptar un enfoque proactivo hablando con sus hijos y encontrando formas de controlar sus hábitos de juego. Aquí hay algunos consejos que pueden ayudar:
- Comunicación abierta :Habla con tu hijo sobre la encuesta de Fortnite y sus hábitos de juego en general. Hágales saber que si bien comprende el atractivo del juego, es esencial priorizar el trabajo escolar.
- Establecer límites :Establezca reglas y límites claros en torno al tiempo de juego, especialmente durante el horario escolar. Un enfoque podría ser permitir el juego durante ciertos momentos, como después de terminar la tarea o los fines de semana.
- Promocionar saldo :Anime a su hijo a participar en una variedad de actividades además de los juegos, incluidas actividades físicas, pasatiempos y pasar tiempo con amigos y familiares.
- Supervisar las interacciones en línea :Asegúrese de que las interacciones en línea de su hijo sean seguras y apropiadas. Fortnite permite a los jugadores interactuar con otros a través de chat de voz o texto, y es importante enseñarle a su hijo cómo navegar las interacciones en línea de manera responsable.
- Considere los controles parentales :Muchas plataformas de juegos ofrecen funciones de control parental que le permiten establecer límites de tiempo, restringir ciertos juegos y monitorear la actividad en línea. Aproveche estas funciones si están disponibles.
Es fundamental abordar este tema con comprensión, empatía y aliento. En lugar de parecer demasiado restrictivo, intente trabajar con su hijo para encontrar un equilibrio entre sus intereses de juego y sus responsabilidades académicas. Al establecer límites, promover hábitos saludables y fomentar la comunicación abierta, los padres pueden ayudar a sus hijos a disfrutar de Fortnite sin comprometer su educación.