- Ha privado a millones de personas de su libertad, ha afectado desproporcionadamente a las personas de color y ha tenido un efecto dominó en sus familias, amigos y vecinos.
- Los hijos de padres encarcelados tienen más probabilidades de sufrir ellos mismos trauma, pobreza y encarcelamiento.
- Las familias y las comunidades tienen que recoger los pedazos, a menudo sin el apoyo que necesitan.
Para cambiar esto, necesitamos:
1. Reducir el número de personas que enviamos a prisión. Podemos hacer esto mediante:
* Despenalizar la posesión y el consumo de drogas.
* Poner fin a las sentencias mínimas obligatorias
* Ampliar el acceso al tratamiento de drogas y a los servicios de salud mental.
* Reformar nuestro sistema de fianzas
2. Invierta en alternativas al encarcelamiento. Podemos hacer esto mediante:
* Ampliación de la supervisión comunitaria
* Crear más oportunidades para programas de desvío
* Invertir en programas de reingreso
3. Apoyar a las familias y comunidades afectadas por el encarcelamiento. Podemos hacer esto mediante:
* Brindar asistencia financiera y apoyo para la vivienda.
* Ofrecer cuidado infantil y otros servicios de apoyo.
* Abordar el trauma y el estigma del encarcelamiento
Trabajando juntos, podemos poner fin al encarcelamiento masivo y su impacto devastador en las familias y comunidades.
He aquí algunos ejemplos específicos de cómo el encarcelamiento masivo ha perjudicado a las familias estadounidenses:
- Un estudio de 2018 encontró que los hijos de padres encarcelados tienen 10 veces más probabilidades de ser encarcelados.
- Un estudio de 2017 encontró que los padres encarcelados tienen más probabilidades de tener hijos que viven en la pobreza y que experimentan inseguridad alimentaria.
- Un estudio de 2016 encontró que los padres encarcelados tienen más probabilidades de tener hijos que experimentan problemas de conducta y dificultades en la escuela.
Éstas son sólo algunas de las muchas formas en que el encarcelamiento masivo perjudica a las familias estadounidenses. Es un problema complejo que no tiene soluciones fáciles, pero debemos trabajar juntos para ponerle fin.