1. Costas coincidentes:
* Fit de rompecabezas: Cuando miras los continentes, particularmente en América del Sur y África, sus costas parecen encajar como piezas de un rompecabezas. Este ajuste es aún más pronunciado al considerar los estantes continentales, la masa de tierra sumergida se extiende desde la costa.
* Similitudes geológicas: Las costas coincidentes están acompañadas de similitudes geológicas, como formaciones rocosas coincidentes, depósitos minerales y registros fósiles, que se encuentran en los continentes que ahora están separados por vastas océanos. Estas similitudes sugieren que estas masas de tierra alguna vez estuvieron conectadas.
2. Distribución fósil:
* fósiles idénticos: Los fósiles de animales y plantas terrestres antiguas, como el reptil mesosaurus y el helecho Glossopteris, se encuentran en continentes ahora separados por océanos. La presencia de fósiles idénticos en continentes distantes es difícil de explicar a menos que alguna vez estuvieran conectadas.
* Patrones de distribución fósiles: La distribución de fósiles sigue un patrón que respalda la idea de la deriva continental. Por ejemplo, los fósiles de ciertos animales se encuentran en América del Sur y África, lo que sugiere una ruta de migración que hubiera sido posible si estos continentes alguna vez se unieran.
3. Evidencia geológica:
* Montañas: Las montañas de los Apalaches en América del Norte y las montañas de Caledonia en Europa comparten características geológicas similares, lo que sugiere que se formaron juntas. Esta evidencia respalda la idea de la colisión continental, un proceso que habría ocurrido si los continentes estuvieran a la deriva.
* Estructuras geológicas: La edad y el tipo de formaciones rocosas a menudo coinciden con los continentes que ahora están separados. Esta consistencia refuerza aún más la idea de que estas masas de tierra alguna vez fueron una sola unidad.
4. Evidencia paleomagnética:
* rayas magnéticas: El campo magnético de la Tierra invierte su polaridad con el tiempo, dejando un registro de estas reversiones en el fondo del océano. Estas rayas magnéticas son simétricas a cada lado de las crestas del océano medio, proporcionando evidencia de la propagación del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo del fondo.
* caminos de vagabundo polar: El estudio de los minerales magnéticos en rocas muestra que los continentes se han movido en relación con los polos magnéticos de la Tierra con el tiempo. Estos datos de "vagabundo polar" indican que los continentes alguna vez estuvieron en diferentes posiciones.
En conclusión: La forma y el tamaño de los continentes, junto con la distribución de fósiles, similitudes geológicas y evidencia paleomagnética, proporcionan un apoyo convincente para la teoría de la deriva continental. Esta teoría, que ahora se ha convertido en la teoría más completa de la tectónica de placas, explica el movimiento de los continentes y la naturaleza dinámica de la superficie de la tierra.