1. Fusión nuclear en el sol: La energía del sol se origina en reacciones de fusión nuclear en su núcleo. Aquí, los núcleos de hidrógeno se fusionan para formar helio, liberando una tremenda cantidad de energía como la luz y el calor.
2. Radiación electromagnética: La energía del sol viaja a la tierra como radiación electromagnética, principalmente en forma de luz visible e radiación infrarroja.
3. Photosíntesis en plantas: Las plantas capturan parte de esta energía de la luz y la convierten en energía química a través de la fotosíntesis. Este proceso utiliza la luz solar, el agua y el dióxido de carbono para crear glucosa (azúcar) y oxígeno.
4. Consumo y respiración: Los animales comen plantas (u otros animales que han comido plantas), obteniendo la energía química almacenada en la glucosa. Durante la respiración celular, esta energía química se libera para alimentar el cuerpo del animal.
5. Contracción muscular: La energía química de la respiración es utilizada por los músculos para contraerse, permitiendo el movimiento, el trabajo y la generación de calor.
6. Generación de electricidad: Parte de esta energía puede ser aprovechada por humanos. Por ejemplo, la quema de madera o combustibles fósiles (que finalmente se derivan de la materia vegetal antigua) libera la energía química almacenada como calor, que puede usarse para generar electricidad.
7. Dispositivos eléctricos: La electricidad generada puede alimentar varios dispositivos, como bombillas, computadoras o automóviles eléctricos. Estos dispositivos convierten la energía eléctrica en diferentes formas, como la luz, el calor o el movimiento.
En resumen:
La energía de fusión nuclear del sol se transforma en luz, absorbida por las plantas a través de la fotosíntesis, almacenada como energía química en las moléculas orgánicas, luego se libera a través de la respiración a los organismos vivos y se usa para generar electricidad u otras formas de energía.