* Bulbos incandescentes: Estas son las bombillas clásicas con un filamento en el interior. El filamento está hecho de un alambre delgado, generalmente tungsteno, que tiene una alta resistencia a la electricidad.
* Cuando la electricidad fluye a través del filamento, la resistencia hace que se caliente a temperaturas extremadamente altas (alrededor de 2500 ° C o 4500 ° F).
* A estas temperaturas, el filamento comienza a brillar brillantemente, emitiendo luz en el espectro visible.
* Entonces, la calefacción es la razón por la que brilla!
* Otros tipos de bombillas:
* Bulbas LED: Funcionan de manera diferente, usando un semiconductor para producir luz sin calor significativo. Se calientan, pero no calientes como una bombilla incandescente.
* Bulbos fluorescentes: Estos bulbos usan una descarga de gas para generar luz ultravioleta que luego excita un recubrimiento de fósforo para emitir luz visible. También se calientan, pero no tanto como las bombillas incandescentes.
En resumen: Para las bombillas incandescentes tradicionales, el calentamiento es esencial para ellos. Sin la alta temperatura, el filamento no emitiría luz.