* Plantas de energía térmica solares: Estas plantas usan espejos para concentrar la luz solar, calentando un líquido para producir vapor. El vapor luego impulsa una turbina, que a su vez genera electricidad. Si bien este proceso produce principalmente energía eléctrica, la turbina es un dispositivo mecánico que convierte la energía térmica en energía mecánica.
* Motores con energía solar: Algunos motores están diseñados para convertir directamente la luz solar en energía mecánica. Esto se realiza con un motor Stirling, que usa el calor de la luz solar para crear diferencias de presión, conduciendo un pistón. Estos motores todavía están en desarrollo, pero tienen el potencial de diversas aplicaciones como impulsar vehículos pequeños o bombas.
* Paneles solares y motores eléctricos: Esta es una ruta más indirecta. Los paneles solares convierten la luz solar en electricidad, que luego pueden alimentar motores eléctricos. Los motores eléctricos son dispositivos mecánicos que convierten la energía eléctrica en movimiento de rotación. Este proceso se usa ampliamente en aplicaciones como vehículos eléctricos, bombas y ventiladores.
En resumen: La energía solar se puede utilizar directa o indirectamente para generar energía mecánica a través de diferentes métodos. El método específico utilizado dependerá de la aplicación y la salida deseada.