1. Plantas de energía de combustible fósil: Estas plantas queman combustibles fósiles como carbón, petróleo o gas natural para calentar agua. El vapor producido impulsa turbinas, que a su vez generan electricidad. Este es un método común pero con impacto ambientalmente debido a las emisiones de gases de efecto invernadero.
2. Plantas de energía hidroeléctrica: Estas plantas aprovechan el poder del agua que fluye. Las presas se construyen en ríos, creando depósitos. El agua se libera del depósito, que fluye a través de las turbinas para generar electricidad. Esta es una fuente de energía renovable y relativamente limpia.