1. quemaduras eléctricas: Estos son el tipo más común de lesión eléctrica y se producen cuando la electricidad fluye a través del cuerpo, causando daños por calor a los tejidos. Pueden variar desde quemaduras superficiales hasta quemaduras profundas y potencialmente mortales.
2. Choque eléctrico: Esto ocurre cuando la corriente eléctrica interrumpe el ritmo normal del corazón, causando una pérdida repentina de conciencia y posiblemente la muerte. La gravedad depende de la cantidad de corriente, la duración de la exposición y el camino que toma la corriente a través del cuerpo.
3. Electrocución: Esta es la forma más grave de lesiones eléctricas, lo que lleva a la muerte. A menudo resulta de una combinación de quemaduras, shock y otras lesiones.
Si bien hay clasificaciones más matizadas dentro de estas categorías, estos tres tipos amplios capturan las formas en que la energía eléctrica perjudica el cuerpo humano.