Entonces, la afirmación de que "más energía entra en algo de lo que sale" es generalmente incorrecto .
Aquí hay algunas posibles razones por las que puede parecer que sale más energía de lo que sale:
* Pérdidas de energía: Si bien la energía no se puede destruir, se puede convertir en formas que son menos útiles o más difíciles de medir. Por ejemplo, cuando se enciende una bombilla, la energía eléctrica se transforma en luz y calor. La luz es útil, pero el calor se pierde principalmente en los alrededores. Esto hace que parezca que la energía está "perdida", pero se ha convertido en una forma menos útil.
* Contabilidad incompleta: A veces, es posible que no podamos dar cuenta de toda la energía que ingresa y abandona un sistema. Por ejemplo, si solo medimos la salida de energía de una planta de energía, podríamos perder la energía perdida como calor durante el proceso.
* malentendido de la transferencia de energía: Es importante recordar que la energía se transfiere, no se pierde. Por ejemplo, cuando levantas un peso, pones energía en él. Esa energía se almacena como energía potencial. Cuando libera el peso, esa energía potencial se convierte nuevamente en energía cinética a medida que cae. La cantidad total de energía permanece constante durante todo el proceso.
En resumen, la ley de conservación de la energía dicta que la energía no se puede crear o destruir, por lo que la cantidad de energía que ingresa a un sistema siempre debe igualar la cantidad que sale, incluso si algunas de ellas se convierten en formas menos útiles.