* fricción: El mecanismo de devanado en sí genera fricción entre las partes móviles, como los engranajes y el resorte. Esta fricción convierte parte de la energía de entrada en calor, que se pierde en los alrededores.
* deformación inelástica: Cuando se enrolla el resorte, sufre una deformación elástica. Sin embargo, parte de la energía utilizada para comprimir el resorte se pierde como calor debido a la fricción interna dentro del material de primavera, que no se recupera por completo cuando el resorte se relaja.
* Calor por quemar: El combustible ardiente en sí produce calor, algunos de los cuales se escapa al aire y no se usan para generar luz.
* Combustión incompleta: Si el proceso de combustión no es perfectamente eficiente, un poco de combustible puede no quemarse por completo, lo que resulta en energía desperdiciada. Esto es especialmente cierto con las antorchas mayores o mal mantenidas.
En resumen:
* La energía de la devanada se pierde por la generación de fricción y calor.
* El combustible quemado crea calor, no todo el cual se usa para la luz.
* desata el combustible y la energía de la combustión ineficiente.
Si bien estas pérdidas de energía son inevitables, las mejoras en el diseño y la fabricación pueden minimizarlas, haciendo que las antorchas de estaño sean más eficientes.