* Proceso pasivo: La ósmosis es un proceso pasivo impulsado por la diferencia en el potencial de agua entre dos soluciones separadas por una membrana semipermeable. El agua se mueve naturalmente de un área de mayor potencial de agua (más moléculas de agua libres) a un área de menor potencial de agua (menos moléculas de agua libre). Este movimiento no requiere que la célula gaste energía.
* Gradiente de concentración: La fuerza impulsora detrás de la ósmosis es el gradiente de concentración del agua, no un mecanismo de bombeo activo. Las moléculas de agua simplemente siguen el camino de menor resistencia, moviéndose para diluir la solución concentrada.
Sin embargo, la ósmosis puede ser influenciada indirectamente por procesos que requeren energía:
* Mantener los gradientes de concentración: Las células mantienen activamente los gradientes de concentración que impulsan la ósmosis. Esto requiere energía para bombear solutos a través de la membrana, creando una diferencia en el potencial de agua.
* Procesos celulares: Algunos procesos celulares, como la fotosíntesis, generan agua como subproducto. Esto puede aumentar el potencial de agua dentro de la célula, influyendo en la ósmosis.
En resumen, la ósmosis en sí es un proceso pasivo que no requiere energía. Sin embargo, las condiciones que crean los gradientes de concentración necesarios para la ósmosis pueden mantenerse mediante procesos celulares que consumen energía.