1. Energía para nuestros cuerpos:
* comida: Esta es la fuente más importante de energía para nuestros cuerpos. Nos proporciona calorías, que nuestros cuerpos usan para alimentar todo lo que hacemos, desde la respiración hasta el pensamiento hasta la mudanza.
* carbohidratos: Rata de energía rápida (piense en pan, pasta, frutas)
* proteínas: Construir y reparar tejidos, contribuir a la energía con el tiempo (piense en carne, huevos, frijoles)
* grasas: Energía duradera, importante para diversas funciones del cuerpo (piense en nueces, aceites, aguacates)
* dormir: Mientras dormimos, nuestros cuerpos reparan y recargan. Una buena noche de sueño es esencial para sentirse energizado.
* agua: La hidratación es clave para muchos procesos corporales, incluida la producción de energía.
* Ejercicio: La actividad física regular puede aumentar sus niveles de energía con el tiempo.
* luz solar: La luz solar ayuda a regular nuestros ciclos de sueño y puede aumentar el estado de ánimo, lo que contribuye a sentirse energizado.
* Conexión social: Pasar tiempo con sus seres queridos puede liberar productos químicos para aumentar el estado de ánimo que lo hacen sentir más enérgico.
2. Energía para nuestro mundo:
* Combustibles fósiles: El petróleo, el carbón y el gas natural se queman para generar electricidad y vehículos eléctricos. Estas son fuentes no renovables, lo que significa que eventualmente se agotaron.
* Energía renovable: La energía solar, eólica, hidroeléctrica, geotérmica y de biomasa son fuentes renovables que se pueden reponer naturalmente.
* Energía nuclear: Esta energía proviene de dividir átomos, proporcionando mucha potencia, pero también generar preocupaciones sobre los desechos y la seguridad.
Es importante tener en cuenta que tanto nuestros cuerpos como nuestro mundo necesitan energía, pero es crucial elegir fuentes sostenibles y saludables a largo plazo.