Sistemas abiertos
* Fuentes de energía: Los sistemas abiertos intercambian fácilmente la materia y la energía con su entorno. Esto significa que pueden obtener energía de:
* Fuentes externas: Los ejemplos incluyen:
* luz solar: Para las plantas a través de la fotosíntesis.
* comida: Para animales y humanos.
* Heat: De combustión, actividad geotérmica, etc.
* Electricidad: Generado a partir de varias fuentes.
* Fuentes internas: Los sistemas abiertos también pueden producir energía internamente a través de procesos como:
* Reacciones químicas: Metabolismo en organismos vivos.
* Reacciones nucleares: En estrellas y reactores nucleares.
Sistemas cerrados
* Fuentes de energía: Los sistemas cerrados intercambian energía con su entorno pero no importan. Sus fuentes de energía son más limitadas:
* Energía interna inicial: Un sistema cerrado comienza con una cierta cantidad de energía.
* Transferencia de calor: La energía se puede transferir como calor de partes más cálidas del sistema a piezas más frías.
* trabajo: El sistema puede hacer el trabajo, transfiriendo energía a su entorno, pero esto está limitado por el contenido de energía inicial.
Diferencias clave
* Intercambio de materia: La diferencia definitoria entre los sistemas abiertos y cerrados es su capacidad para intercambiar materia. Los sistemas abiertos pueden ganar y perder materia, mientras que los sistemas cerrados no pueden.
* Diversidad energética: Los sistemas abiertos tienen una gama mucho más amplia de fuentes de energía porque pueden acceder a fuentes internas y externas. Los sistemas cerrados están más limitados a la energía interna y las formas limitadas de transferencia de calor.
Ejemplos
* Sistemas abiertos: Un organismo vivo (como un humano), un ecosistema (como un bosque), un motor de automóvil.
* Sistemas cerrados: Un recipiente aislado con agua caliente, un recipiente de reacción sellado, la atmósfera de un planeta (aunque en realidad, esto puede considerarse semicerrado).
Nota importante: La distinción entre sistemas abiertos y cerrados es algo idealizada. En realidad, la mayoría de los sistemas están en algún lugar entre completamente abiertos y completamente cerrados, con diversos grados de materia e intercambio de energía.