* Heat: Esta es la forma más común de conversión de energía. El impacto genera fricción entre los pesos y el suelo, lo que hace que las moléculas vibren más rápido, lo que lleva a un aumento de la temperatura.
* sonido: El impacto crea vibraciones en el aire, que percibimos como sonido.
* deformación: Si el impacto es lo suficientemente fuerte, puede deformar los pesos o el suelo. Esta deformación requiere energía.
* Energía potencial (en un rebote): Si los pesos se recuperan, parte de la energía cinética se convierte en energía potencial a medida que aumentan.
La proporción exacta de energía cinética convertida en cada forma depende de factores como:
* Material de los pesos y el suelo: Los materiales más suaves absorberán más energía a medida que el calor y la deformación, mientras que los materiales más duros producirán más sonido.
* Velocidad del impacto: Una mayor velocidad de impacto conducirá a que se convierta más energía en calor, sonido y deformación.
Nota importante: Esta no es una conversión de energía perfecta. Siempre se pierde cierta energía debido a factores como la fricción y la resistencia al aire. Esto está en línea con la ley de conservación de la energía, que establece que la energía no puede ser creada o destruida, pero solo puede transformarse de una forma a otra.