* La formación lleva millones de años: Los combustibles fósiles como el carbón, el petróleo y el gas natural se forman a partir de los restos de plantas antiguas y animales enterrados bajo capas de sedimento durante millones de años. Este proceso es extremadamente lento.
* La tasa de agotamiento es mucho más rápida que la formación: Estamos utilizando combustibles fósiles a una velocidad que excede su tasa de formación natural. La cantidad de combustibles fósiles que extraemos y consumimos cada año supera enormemente la cantidad que se está creando.
* suministro limitado: Si bien hay grandes reservas de combustibles fósiles, no son ilimitados. A medida que continuamos usándolos, eventualmente se agotarán.
En otras palabras, estamos consumiendo combustibles fósiles a un ritmo mucho más rápido de lo que se están reponiendo, haciéndolos recursos finitos.